Al utilizar nuestro sitio web, acepta el uso de nuestras cookies.

Artículo

Destacado

Declaración oficial acerca del Matrimonio y los derechos de los Homosexuales dentro y fuera de la Iglesia. 

Declaración oficial acerca del Matrimonio y los derechos de los Homosexuales dentro y fuera de la Iglesia.

Fuente: LDS Newsroom
Traducción Camila Vargas

Declaración oficial del Director de Asuntos Públicos de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (Mormones), acerca del Matrimonio y los derechos de los Homosexuales dentro y fuera de la Iglesia, en octubre de 2010.

“Mi nombre es Michael Otterson. Estoy aquí en representación de la dirección de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días para abordar el asunto de la petición presentada hoy por la Campaña de Derechos Humanos”.

“Si bien estamos en desacuerdo con la Campaña de los Derechos Humanos en muchos aspectos, también compartimos ciertos valores en común. La semana pasada, nos enteramos de una serie trágicas muertes en Estados Unidos como resultado del bullying o de la intimidación en contra jóvenes homosexuales. Nos declaramos de acuerdo con todos quienes condenan sin reserva los actos de crueldad o intentos para menospreciar o burlarse de cualquier grupo o individuo que sea diferente –ya sea que estas diferencias surjan de la raza, de la religión, de algún problema de índole mental, de la condición social, de la orientación sexual o que surjan de cualquier otra razón. Tales acciones simplemente no tienen cabida en nuestra sociedad”.

“Esta Iglesia experimentó en carne propia el aguijón de la amarga persecución y marginación en los comienzos nuestra historia, cuando éramos muy pocos en número para protegernos adecuadamente y cuando los líderes de entonces a menudo parecían poco dispuestos a ayudarnos. Nuestros padres, adultos jóvenes, adolescentes y niños deben ser especialmente sensibles hacia los más vulnerables en la sociedad y deben estar dispuestos a hablar en contra del bullying o la intimidación cada vez que se produzca, incluyendo la falta de bondad hacia aquellos que se sienten atraídos a otros del mismo sexo. Esto es particularmente así en nuestras propias congregaciones. Cada familia Santo de los Últimos Días debe considerar cuidadosamente si sus actitudes y acciones hacia los demás reflejan adecuadamente el segundo gran mandamiento de Jesucristo que es amarnos unos a otros”.

“Como Iglesia, nuestra posición doctrinal es clara: cualquier actividad sexual fuera del matrimonio es incorrecta, y definimos el matrimonio como un vínculo entre un hombre y una mujer. Sin embargo, eso debe nunca debe ser utilizado como justificación para la falta de amabilidad.  Jesucristo, a quien seguimos, fue claro en su condena a la inmoralidad sexual, pero nunca fue cruel. Su interés fue siempre el de levantar al individuo, nunca destruirlo”.

“Además, si bien la Iglesia en gran medida se ha opuesto al matrimonio entre personas del mismo sexo, ha apoyado abiertamente otros derechos para gays y lesbianas, como su protección en materia de vivienda o empleo”.

“La doctrina de la Iglesia se basa en el amor. Creemos que nuestro propósito en la vida es aprender, crecer y desarrollarnos, y que el amor incondicional de nuestro Padre Celestial, permite que cada uno de nosotros pueda alcanzar su potencial.

“Ninguno está limitado por nuestros sentimientos o inclinaciones. En última instancia, somos libres para actuar por nosotros mismos”.

“La Iglesia reconoce que hay entre sus miembros quienes se sienten atraídos por personas del mismo sexo y que experimentan profundos sentimientos y emociones sociales y físicas. La Iglesia distingue entre sentimientos o inclinaciones por un lado y el comportamiento por el otro. No es pecado tener sentimientos, sino el ceder a la tentación”.

“No hay duda de que esto es difícil, pero los líderes de la Iglesia y los miembros están dispuestos para ayudar a levantar, sostener y animar a aquellos miembros que deseen seguir la doctrina de la Iglesia. Su lucha es nuestra lucha. Los que están en la Iglesia, que se sienten atraídos por alguien del mismo sexo, y pueden permanecer fieles a las enseñanzas del evangelio, pueden ser felices en esta vida y llevar a cabo un servicio significativo en la Iglesia. Pueden disfrutar de la plena comunión con otros miembros de la Iglesia, incluyendo asistir y servir en los Templos, y en última instancia, recibir todas las bendiciones que se ofrecen a los que viven los mandamientos de Dios”.

“Obviamente, algunos no estarán de acuerdo con nosotros. Esperamos que cualquier desacuerdo se base en una comprensión cabal de nuestra posición y no en la distorsión o una interpretación selectiva. La Iglesia continuará hablando a fondo para asegurarse de que su posición se entienda con precisión”.

“La paternidad universal de Dios, deposita en cada uno de nosotros un reconocimiento innato y reverente de nuestra dignidad humana. Debemos amarnos unos a otros. Hemos de tratar a los demás con respeto, como hermanos y hermanas y compañeros de otros hijos de Dios, no importa lo mucho que se diferencien entre sí”.

“Esperamos y creemos firmemente que dentro de esta comunidad, y en otras, la bondad, la persuasión y la buena voluntad pueden prevalecer”.

1 Comment

  1. Los 10 más leídos del 2014 | El Faro Mormón

    […] año estuvo marcado por una gran efervescencia en torno al sensible tema del matrimonio homosexual y los derechos de quienes se identifican como tal. La Iglesia ha tenido que levantar su voz en varias ocasiones durante el proceso para recalcar su […]

Deja un comentario

WordPress Theme built by Shufflehound. Todo el contenido de Faro a las Naciones se encuentra bajo una LicenciaAtribución/Reconocimiento-NoComercial-SinDerivados 4.0 Internacional

Descubre más desde Faro a las Naciones

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo