Gregorio Billikopf fue el autor de 131 artículos en este sitio web, los cuales trataban de estudio de las Escrituras, sobre todo el Antiguo Testamento y el Libro de Mormón, resolución de conflictos e historia familiar. Algunos de sus artículos fueron los más leídos en nuestra historia.

SANTIAGO DE CHILE — A sus 19 años en 1974, mientras estudiaba ciencias agropecuarias en la Universidad de California, Davis (UC Davis), Gregorio decidió bautizarse en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Sus padres, que profesaban la religión católica romana, no estaban de acuerdo, así que le pidieron que antes de unirse a esta nueva iglesia, hablara con un sacerdote católico. El presidente de la rama a la cual asistía le invitó a ser obediente al consejo de sus padres. 

Así fue que concertó una cita con un sacerdote y le compartió su convicción en haber encontrado la verdad. Años más tardes, Gregorio comentó que «el sacerdote me dijo que era tan obvio que yo creía que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días era la Iglesia verdadera, que yo sería un hipócrita si no me unía a ella». Haciendo caso no solo al cura, sino que su testimonio del Libro de Mormón, descendió a las aguas del bautismo el 19 de marzo de ese año

Fue asesor agrícola en administración laboral con la extensión agrícola de la Universidad de California (desde 1981) y profesor visitante de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile (desde 2005). Se especializó en productividad laboral y resolución de conflicto, escribiendo varios libros y artículos académicos sobre estas materias, algunos de estos galardonados por organizaciones del rubro. 

Sus conocimientos en el área fueron demandados internacionalmente, llevándolo a dictar seminarios por todo el mundo. Hablando sobre sus viajes, Gregorio bromeó con el hecho de haber visitado todos los continentes con la excepción de la Antártida: «Supongo que los pingüinos no necesitan ninguna ayuda en la productividad o en la gestión de conflictos». 

David Gregory Billikopf Encina, nació el 23 de septiembre de 1954 en Santiago de Chile de un padre judío estadounidense (David Marshall Billikopf) y una madre chilena (María Luisa Encina Bezanilla) quienes le heredaron diversa historia familia que él atesoraba. Sus antepasados paternos son judíos de diferentes procedencias, incluido Lituania y Alemania. Por el lado de su madre, está emparentado con el Premio Nacional de Literatura, el destacado y controvertido historiador Francisco Antonio Encina. 

Siendo aún estudiante de la UC Davis, conoció a Linda Marsing, a quien cortejó y escogió como compañera para escribir su propia historia familiar. Dos años después de su bautismo, Gregorio y Linda entraron al Templo de Oakland California y fueron sellados como esposo y esposa por esta vida y por la eternidad. Fruto del matrimonio, nacieron cinco hijos y una creciente cantidad de nietos. 

Sus estudios y seminarios sobre mediación y resolución de conflicto no se quedaron solo en los libros y la academia ya que los hizo parte de sí. Además, su experiencia superando los desafíos que conllevaba su trastorno del espectro autista (TEA) en la interacción con otros, supuso un aprendizaje personal y teórico en cuanto a relacionarse efectivamente con otro. Todo este conocimiento lo puso a disposición de los demás.

Así fue como cuando invitó a su casa a Priscila Huainao, una joven miembro de su misma rama en Llanquihue, luego de haber impartido una clase. Sin ella esperar y como él era «tan bueno para escuchar» que Priscila terminó desahogando todos sus problemas con él. «Desde ahí, siempre que tuve dificultades él estaba preocupado de mi… Él ha sido como un padre para mí». 

«Él nos enseñó no solo a usar palabras para no ofender, sino que a ponernos en el lugar de la otra persona», recuerda Priscila. «Siempre lo vi como una persona muy sabia… a través de él podía sentir paz». En todos los elogios a Gregorio Billikopf se repiten su amistad, su conocimiento, su servicio y su testimonio. 

El élder Sergio Vargas, setenta de área y amigo personal del hermano Gregorio, habla de él como «una de las personas más dulces e instruidas que he conocido» y como un «amigo incondicional». El obispo Bastián Novoa del ahora Barrio Llanquihue, también lo recuerda como «un gran amigo».

Sería un error resumir el servicio en la Iglesia del hermano Gregory E. Billikopf solo por sus llamamientos de liderazgo, los cuales incluyeron ser presidente de la Rama El Vista (Español) de la Estaca Modesto California (2003-2009), consejero de la Rama Llanquihue (2014-2015) y últimamente como asesor de historia familiar y templo del área y obrero del Templo de Concepción Chile. «¡Siempre estuvieron dispuestos a servir!», dice el obispo Novoa sobre los Billikopf, «amaban servir a las personas». 

Priscila asegura que «él nos enseñó a ver que hay cosas que pueden ser tan pequeñas o insignificantes pero que pueden hacer la diferencia en el trato con otra persona». Así como el hermano Billikopf sirvió a Priscila escuchando, sirvió al élder Vargas hablando: «Por mucho tiempo solo me hablaba en inglés porque quería ayudarme a mejorar el idioma y creo que me enseñó esa lección, que viene de ser constante».  

Otra de las maneras en que sirvió a los santos de Llanquihue fue regalando la ropa del templo a todos los hermanos del barrio que recibían sus investiduras, «y lo siguieron haciendo a pesar de ya no vivir en Chile», dice el obispo Novoa. El número de personas a las que ayudó de alguna manera junto a su esposa será imposible de contar ya que, según el obispo, él lo hacía «anónimamente», ya que «no les ser reconocidos públicamente por lo que hacían». 

Investigando sobre su familia, desarrolló el amor y mucha experiencia por esta obra. «Ellos amaban la historia familia», comenta el obispo Novoa, «hacían capacitaciones, tutoriales y todo lo que estaba a su alcance para ayudar a los hermanos a hacer sus propias historias familiares y llevar las bendiciones del templo sus miles de antepasados». 

Esos tutoriales aún están disponibles en YouTube sobre cómo usar las herramientas de FamilySearch. Muchos de sus artículos publicado en el Faro a las Naciones corresponden a consejos para la investigación. En septiembre de 2017, él su esposa fueron llamados a servir como asesores de historia familiar y templo del Área Sudamérica Sur asignados a consejo de coordinación de Puerto Montt.

Ya estando retirado del trabajo académico, no dejó de estudiar. En su casa con una hermosa vista al Lago Llanquihue enseñoreado por el Volcán Osorno, comenzó a profundizar y escribir sobre el evangelio. Gregorio Billikopf fue el autor de 131 artículos en Faro a las Naciones, los cuales trataban de estudio de las Escrituras, sobre todo el Antiguo Testamento y el Libro de Mormón, resolución de conflictos, palabras de los profetas actuales e historia familiar.  

Algunos de sus artículos están entre los más visto en la historia de este medio. Su último artículo fue el 1 de mayo, titulado «No cultivemos el arbol del orgullo», el cual era el primero de una serie de artículos sobre evitar la contención y se pacificadores inspirados en el mensaje del profeta de la Iglesia, Russell M. Nelson.  

«Él conocía las escrituras como pocos», comenta el élder Vargas. «Toda su capacidad la volcó en escribir sobre Jesucristo, sobre todo en su obra Isaías testifica de Jesucristo, que le tomó muchos años de escribir, quizás por su origen judío quería con todo su corazón enseñar a su pueblo que Jesucristo es el centro de todo y para todos, y que todas las escrituras testifican de Él».  

Es libro, Isaías testifica de Jesucristo, lo puso en internet para su descarga gratuita. Ahora tenía en curso otro proyecto similar que, por su repentino fallecimiento, no alcanzó a publicar: Zacarías testifica de Jesucristo.

Eso sí, en enero de este año llegó al destino que le faltaba visitar: la Antártida Chilena. Ahora, ya había pisado todos los continentes del mundo.

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En 1970, Gregorio estudiaba en una escuela católica en Providencia (Santiago de Chile) cuyas instalaciones estaba siendo vendida a la Iglesia de Jesucristo. El maestro de Gregorio, un sacerdote norteamericano les dio una tarea relacionada con el futuro dueño del inmueble: «quiero que cada uno de ustedes… escriba un informa sobre La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días». 

Para cumplir con la asignación, el joven Gregorio de 14 años visitó la casa de la misión que quedaba a cuadras de su casa y los misioneros le obsequiaron revistas, fotografías y un libro, el Libro de Mormón, el cual no tenía muchas ilustraciones así que no era de su interés, aunque no lo desechó. Hizo su tarea, la mostró a su maestro y dijo que fue la mejor de toda su clase. 

El joven Gregorio nunca hubiera imaginado a esa edad la importancia que tendría ese libro en su vida más adelante, ni tampoco en qué se iba a convertir su escuela: el Templo de Santiago de Chile. 

Su paso por esta vida terrenal acabó repentinamente el día miércoles 5 de julio de 2023, por motivos de salud, en California, donde vivió sus últimos años junto a su esposa. 

«Ha cruzado el velo un hombre instruido, fiel, poseedor de un poderoso testimonio de conversión», expresa el élder Vargas y su testimonio quedó plasmado en innumerables textos y corazones. Una de esas verdades se la enseñó a Priscila cómo debía orar para recibir revelación. Esa verdad también la compartió en Faro a las Naciones en marzo de 2018 en un artículo que cerró con la siguiente invitación, la cual compartimos aquí, junto con su testimonio compartido en otra publicación:  

«Lo invito, si lo desea, a que en cada oración le pregunte al Padre si Él lo está escuchando. No sólo una vez como parte del experimento, sino que siempre. Al transcurrir el tiempo, sentirá que el Padre le está acompañando a través de cada oración y que está en constante comunión con Él… deseo reafirmar que cada persona tiene una relación especial con Dios y recibe inspiración según sus necesidades y yo sólo he compartido algunas cosas que me han servido en mi vida». 

«Testifico que Jesucristo es el Hijo de Dios, nuestro Salvador y Redentor. Que nos ama a cada uno con un amor infinito y que Él dirige a su Iglesia sobre la tierra, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días». 

Un servicio conmemorativo en honor a su vida se llevará a cabo el 21 de julio de este año a las 10:00 PST (13:00 hora de Santiago de Chile) en el centro de reuniones de la Rama Lincoln 4 ubicado en Liberty Lane 1155, Lincoln (California). El servicio también será transmitido por el canal de la rama en YouTube.

Escucha aquí su historia de conversión y testimonio: