Con más de 21 millones de refugiados en todo el mundo, continúan los esfuerzos de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días por ayudar en esta crisis mundial haciendo una nueva e importante contribución monetaria US$2 millones a dos organizaciones de caridad el pasado lunes 29 de agosto, según informó la Iglesia a través de un comunicado.
Quienes representaron a la Iglesia en la entrega de estas donaciones fueron autoridades que fuertes lazos con Latinoamérica: el obispo W. Christopher Waddel, segundo consejero del Obispado Presidente de la Iglesia que anteriormente sirvió como consejero del Área Sudamérica Noroeste, y el Steven K. Peterson, gerente general del Departamento de Bienestar de la Iglesia que en su momento presidió la Misión Uruguay Montevideo Oeste.
Las donaciones fueron entregadas a la Conferencia Episcopal Católica de los Estados Unidos (US$1,25 millones) y al Comité Internacional de Socorro (US$750 mil). Estas organizaciones prestan ayuda a los refugiados al llegar a los Estados Unidos con diferentes servicios en los primeros meses desde su llegada.
El obispo Waddell se mostró «agradecido por esta continua relación y por las oportunidades que ellos proveen de ayudar en uno de los principios fundamentales del evangelio: el cuidar de aquellos que se puedan sentirse como forasteros entre nosotros… Esto incluye a aquellos quienes han sido expulsado de sus hogares y se encuentran en circunstancias nuevas y desconocidas».
En los meses recientes, la Iglesia ya ha comprometido US$6 millones para ayudar a los refugiados que se encuentran en los Estados Unidos y también ha hecho otras importantes contribuciones monetarias para los refugiados en Europa.
Adicionamente, voluntarios SUD en todo el mundo, tanto con el auspicio de la Iglesia como de manera independiente, han hecho caso a la invitación de Primera Presidencia de ir al socorro de los refugiados. Por ejemplo, ese sábado el grupo Fui Forastero Chile realizará colecta de alimentos y artículos de aseo para proveer a los refugiados en el país sudamericano.
Imagen destacada: El obispo W. Christopher Waddell, segundo consejero del Obispado Presidente de la Iglesia (al centro), con Steven K. Peterson, gerente general del Departamento de Bienestar de la Iglesia (izquierda), entregan al monseñor J. Brian Bransfield, secretario general de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos, una donación de US$1,25 millones para ayudar a los refugiados en los Estados Unidos, el lunes 29 de agosto de 2016. | Iglesia SUD.
