Fuente: El blog de FamilySearch
¿Se ha sentido alguna vez alarmado por no poder recordar una historia familiar o experiencias que usted sabe que ha escuchado muchas veces a sus abuelos relatar? ¿Alguna vez se preguntó por qué sabe muy poco acerca de la vida personal de sus abuelos o bisabuelos?
Aaron Holt de la Administración Nacional de Archivos y Registros dice que “sólo se necesitan tres generaciones para perder una porción de historia familiar oral”. Si quiere evitar la pérdida de esas preciadas historias de la familia que han pasado de generación en generación, Holt continuó diciendo, la historia “debe repetirse intencionalmente y con precisión una y otra vez a través de las generaciones a fin de ser preservada”.
Jim Ison, un Gerente de Área de FamilySearch.org quien recientemente dirigió la palabra en la conferencia nacional 2014 de la Sociedad Genealógica en Richmond, Virginia, dijo que la idea de que los relatos de su familia pudieran perderse en tres generaciones le dio la determinación de asegurarse que esto no sucediera.
Ison, un genealogista acreditado, compartió un descubrimiento similar que tuvo el año pasado durante una sesión de RootsTech 2013 presentada por el director general de FamilySearch, Dennis Brimhall. Dijo que Brimhall hizo una pregunta para detenerse y pensar: “¿Qué desearán sus bisnietos que usted hubiera hecho?”
Ison ha dedicado toda una vida investigando la genealogía de su familia, extendiendo y documentando meticulosamente generación tras generación de su árbol familiar. Pero se encontró frente a una pregunta muy interesante en verdad, “¿Qué DESEARÍAN sus bisnietos, la mayoría de los cuales probablemente nunca llegaría a conocer en esta vida, que él hubiera hecho?”
Ison pensó: “Nadie conoce a mis antepasados o sus historias como yo. Yo soy el nexo entre mis nietos y mis abuelos.” Decidió en ese momento en 2013 poner a un lado su pasión por la investigación genealógica y su objetivo a largo plazo de rastrear su genealogía hasta el gran Carlomagno, y en su lugar comenzó a enfocarse en las admirables historias personales de sus padres y abuelos, cosas que él pensó que sus bisnietos querrían saber y que desearían que él se hubiera tomado el tiempo para hacerlo.
Comenzó con una caja con fotos viejas de la familia que tenía guardada en el armario y que su padre le había pasado a él, la cual su padre había recibido de su madre. “Al igual que mi padre”, Ison señaló: “Guardé la caja en mi armario para preservar su contenido por otra generación. El problema es que una caja no permite que las fotos se puedan compartir, acceder o disfrutar a través de las generaciones”.
Para comenzar con su nuevo proyecto, Ison escogió una pareja particular de abuelos, Lorilla Spencer y Frank (Reight) Ison. Escaneó sus fotos y las cargó a su cuenta gratuita de FamilySearch.orgy agregó otros documentos fuente que había acumulado durante sus años de investigación. Luego editó y agregó historias que su padre había escrito sobre sus abuelos años antes y las conservó y compartió en línea a través del Árbol Familiar de FamilySearch.
“Las fotos pasaron de mi caja de zapatos a la ‘nube’ en línea en FamilySearch para preservarlas para el futuro”, dijo Ison triunfalmente. “Ahora un bisnieto a 1.600 kilómetros de distancia puede ver las mismas fotos y leer las mismas historias”.
Ison citó la investigación de un artículo del New York Times de 2013 por el autor Bruce Feiler, quien observó: “La cosa más importante que usted puede hacer por su familia puede ser la más simple de todas: Desarrollar una fuerte narrativa familiar”. La investigación observó que los niños que sabían más acerca de sus antepasados—quiénes eran, dónde crecieron, las enfermedades que sufrieron y las pruebas difíciles que tuvieron que enfrentar—tenían mayor seguridad en sí mismos y manejaban el estrés personal de mejor manera.
Por el bien de la posteridad, Ison se centró en resaltar esos aspectos más destacados de la vida personal de los antepasados que conoció y descubrió a través de la investigación.
Por ejemplo, la madre de su abuelo bávaro murió cuando él era un niño pequeño. Su bisabuelo se volvió casar con una “madrastra malvada”, que los castigaba todas las mañanas y les decía que la paliza era por todo lo malo que fueran a hacer durante el día que ella no se enteraría. Este abuelo y su hermano mayor, finalmente huyeron de la casa y cambiaron su apellido para evitar su captura. Emigraron a Estados Unidos, trabajaron duro y tuvieron mucho éxito.
Su abuela fue maestra de escuela a una edad muy joven. Ella quedó emocionalmente afectada cuando su prometido murió en un trágico accidente. Para escapar del constante recuerdo de su dolor en la comunidad local, solicitó enseñar en Alaska, pero fue rechazada, irónicamente, porque no estaba casada. Solicitó en Georgia pero se le negó porque era una “Yankee” de South Dakota. Solicitó en Kentucky y fue aceptada, lo que explica por qué estuvo dispuesta a viajar más de 2.000 kilómetros a caballo por su cuenta, sin las comodidades del hogar y la familia.
Cuando estaban recién casados, el hogar de estos mismos abuelos se quemó por completo.
Ison creó preguntas a partir de las historias y las fotos de estos dos abuelos, Frank y Lorilla, que pudieran motivar a sus nietos a saber más sobre sus fascinantes bisabuelos.
- A los 9 años, ¿por qué Frank y su hermano se fueron de la casa?
- ¿Qué hizo en Estados Unidos mientras que servía en la marina alemana?
- ¿Quién fue responsable de que cambiara su apellido de “Rieght” a “Ison”?
- ¿Cuántos años tenía Lorilla cuando comenzó a enseñar?
- ¿Qué se le entregó como parte de sus materiales normales para enseñar? (Respuesta: un pistola)
- ¿Por qué se mudó a más de 2.000 kilómetros de South Dakota a Kentucky?
Ison dijo que se maravilló al ver lo fascinados que estaban sus nietos buscando las respuestas en las fotos e historias que publicó en internet en FamilySearch.org y la facilidad con que navegaron las herramientas en línea para hacerlo.
Para los nietos más pequeños, publicó 75 páginas de historias y fotos, y ha creado otras actividades divertidas como crucigramas, tablas de bingo y juegos de memoria con información sobre los antepasados, que disfruta hacer con los nietos cuando lo visitan. “Se sorprenderá al ver la cantidad de preguntas que sus nietos tendrán de sólo una historia sobre algún antepasado”.
Ison ahora repetirá el proceso con otros abuelos y antepasados en su árbol, muy contento en su nuevo papel como la conexión intergeneracional de su posteridad.
Fotografía: Blog de FamilySearch