Desde hace ya varios años, la retención de los miembros nuevos de la Iglesia esta relacionada con la asitencia al templo y al trabajo que ellos efetuén con su historia familiar. A medida que las personas nuevas en la Iglesia van al templo a efectuar la obra por sus antepasados, ellos permanecen más firmes en el evangelio.
Hace un par de meses se dió una instrucción a los obispos/presidentes de ramas y presidentes de estacas/presidentes de distritos/misión de prestar atención a lo siguiente:
El obispo debe entrevistar a todos los miembros nuevos de doce años en adelante para recibir una recomendación para el templo de uso limitado poco después de su confirmación, por lo general
dentro de una semana.
Estas entrevistas importantes proporcionan una oportunidad para que los obispos ayuden a los miembros nuevos a entender la importancia del templo, incluso guardar los mandamientos que los
califican para entrar en ellos.
En nuestros de esfuerzos por ministrar y fortalecer a las familias y a las personas, podemos tener en cuenta este enfasis, trabajar en la historia familiar y visitar nuestros templos.