En la noche de ayer jueves, el Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, se reunió con importantes líderes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el Hotel Sheraton de Salt Lake City, luego de haber arribado a Utah por primera vez en calidad de presidente desde que asumió su segundo mandato. En la reunión estuvieron presentes los presidentes Henry B. Eyring y Dieter F. Uchtdorf, ambos consejeros de la Primera Presidencia, junto los élderes L. Tom Perry y D. Todd Christofferson, del Quórum de los Doce Apóstoles.
Según informaron los principales periódicos locales, el Subsecretario de Prensa de la Casa Blanca, Eric Schultz, dijo que «el Presidente [Obama] se complace en reunirse con los principales líderes SUD así como lo han hecho muchos otros presidentes antes que él».
En la reunión se abordaron temas como el largo historial de servicio de la Iglesia, incluyendo su labor de auxilio en tiempos de desastres y otros asuntos humanitarios, la familia, la libertad religiosa, la anti-discriminación y la necesidad de arreglar el defectuoso sistema de inmigración de los Estados Unidos. También se conversó de la necesidad de forjar puntos de acuerdo en medio de las diferencias y de promover el servicio al prójimo, tanto en los Estados Unidos como alrededor del mundo.
Por su parte el vocero de la Iglesia, Eric Hawkins, excusó al presidente Thomas S. Monson, de 87 años de edad, por su inasistencia a la reunión con el presidente Obama: «El presidente Monson recuerda con cariño su visita a la Casa Blanca el 2009 para regalar al presidente Obama su historia familiar personal. Debido a la necesidad de preservar sus fuerzas para la conferencia general de este fin de semana, se consideró que con la logística de reunirse fuera de las oficinas de la Iglesia, con el caminar y los tiempos de espera asociados a una visita presidencial, lamentablemente no sería propicia la participación del presidente Monson».
Uno de los líderes de la Iglesia participantes del encuentro ya se había reunido con el presidente Obama con anterioridad. El presidente Uchtdorf fue uno de los varios líderes religiosos que fueron convocados a conversar con el presidente Obama en la Oficina Oval de la Casa Blanca sobre los ajustes necesarios al sistema inmigratorio norteamericano en abril del año pasado.
Esta importante visita presidencial ocurre dos días antes de la Conferencia General Anual de la Iglesia que, desde los días previos, comienza a congregar a santos de los últimos días provenientes de todos los rincones de los Estados Unidos y del mundo.