SALT LAKE CITY, Utah — A casi dos meses luego de la su breve declaración sobre el nombre de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, el presidente Russell M. Nelson habló en extendido sobre la importancia del nombre completo de la Iglesia.
Hablando durante la sesión del sábado por la mañana de la conferencia general de octubre de 2018, citó la escritura de 1838, dad por la voz de Jesucristo, es la que detalla el nombre de la Iglesia: “porque así se llamará mi iglesia en los postreros días, a saber, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”.
“Para gran parte del mundo, la Iglesia del Señor en la actualidad está camuflada como la ´Iglesia Mormona´. Pero como miembros de la Iglesia del Señor sabemos quién está a la cabeza de ella: Jesucristo mismo”, dijo el presidente Nelson. “Me doy cuenta y me lamento profundamente de que hemos consentido inadvertidamente en que la Iglesia restaurada del Señor sea llamada por otros nombres, ¡todos los cuales borran el sagrado nombre de Jesucristo!”.
Estos apodos incluyen “Iglesia SUD”, “Iglesia Mormona” e “Iglesia de los Santos de los Últimos Días”. En estos nombres, dijo el presidente Nelson, “la omisión más obvia es la ausencia del nombre del Salvador… Cuando desechamos el nombre del Salvados, desdeñamos sutilmente todo lo que Jesucristo hizo por nosotros, incluso Su Expiación”.
A aquellos que lo consideran imprudente o poco realista el restaurar el uso correcto del nombre de la Iglesia, el presidente Nelson respondió que “si se trata de un debate sobre la marca comercial de un organización creada por el hombre, tales argumentos podrían ser tomados en cuenta. Pero en esta asunto tan crucial, recurrimos a Aquel cuya Iglesia ésta es y reconocemos que los cambios de Jehová no son y jamás serán los caminos de los hombres”. El presidente Nelson dijo que los santos de los últimos días deben pensar a largo plazo y recordar que Dios ayudará a la Iglesia a tener éxito con esta corrección del nombre.
“Si somos pacientes y hacemos nuestra parte, el Señor nos dirigirá a través de esta importante tarea”, dijo. “Queremos ser corteses y pacientes en nuestros esfuerzos por corregir estos errores. Los medios de comunicación responsables serán comprensivos con respuesta a nuestra petición”.
El presidente Nelson dijo que reconoce que algunas personas continuarán llamando la Iglesia por otro nombres. Aún así, “no tenemos derecho a sentirnos frustrados si la mayoría del mundo llama a la Iglesia y a sus miembros por los nombres incorrectos si nosotros hacemos lo mismo”.
Este énfasis, dijo el presidente Nelson, “no un cambio de nombre. No es un cambio de marca comercial. No es algo cosmético. No es un capricho. Y no es algo intrascendente. Si es una corrección. Es el mandamiento del Señor”.
Dijo que los esfuerzos individuales de los santos de los últimos días para usar el correcto nombre de la Iglesia rendirán significativos frutos en los días por venir.
“Si hacemos lo mejor de nosotros para restaurar el correcto nombre de la Iglesia del Señor, Aquel cuya Iglesia ésta es derramará Su poder y bendiciones sobre las cabezas de los santos de los últimos días, como las que nunca hemos visto”, dijo el presidente Nelson. “Tendremos el conocimiento y poder de Dios para ayudarnos a tomar estas bendiciones del evangelio restaurado de Jesucristo a toda nación, tribu, lengua y pueblo y para preparar el mundo para la Segunda Venida del Señor”.