Frente al devastador terremoto que afectó al país de Marruecos, la presidencia del Área Cercano Oriente/África Norte compartió una declaración expresando sus condolencias, simpatía y disposición a ayudar «en todo lo que sea posible».
El terremoto de magnitud 6.8°, con epicentro a 72 kilómetros hacia el suroeste de Marrakech (casi un millón de habitantes), podría ser solo un temblor fuerte en países de la costa del Pacífico (como Chile o Japón), pero en un país sin la infraestructura necesaria, un sismo de esta envergadura a unos escasos 26 kilómetros de profundidad, los resultado son devastadores.
En las localidades cercanas al epicentro se sitió de grado VIII en la escala subjetiva de Mercalli, causando más de 2 122 muertos (cómputo que aumenta dramáticamente hora tras hora) y heridos por sobre los 2 400.
En la actualidad, alrededor de un centenar de santos de los últimos días viven en Marruecos los cuales pertenecen a la Rama Rabat, con sede en la capital del reino, que es parte del Distrito El Cairo Egipto. A principios de la década de 1950 se comenzaron a reunir los primeros miembros de la Iglesia en Rabat y se conformó como rama en 1982. A pesar de ser descontinuada por algunos años, la rama fue reestablecida en 2011.
La presidencia del Área Cercano Oriente/África Norte está integrada las autoridades generales los élderes Anthony Perkins (estadounidense, presidente), Adilson de Paula Parella (brasileño, primer consejeros) y el setenta de área el élder Roland Bäck (austriaco, residente de los Emiratos Árabes Unidos).
La siguiente es la declaración de la presidencia del área:
«Es con gran pesar que hemos conocido las trágicas consecuencias del terremoto que golpeó al Reino de Marruecos. En nombre de los miembros y líderes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, expresamos nuestras sentidas condolencias a su majestad el rey Mohamed VI, al gobierno y a todo el pueblo de Marruecos. Nuestros pensamientos y oraciones están con las familias y personas que sufren durante este momento desafiante.
«Los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días de todo el mundo, incluyendo los de África y del Cercano Oriente, se unen en oración por aquellos que son parte de los esfuerzos de rescate y para la pronta recuperación de los que resultaron heridos durante el terremoto.
«Estamos disponibles para apoyar al gobierno marroquí en todo lo que sea posible. Por el momento, la Iglesia está trabajando activamente con organizaciones de auxilio para proveer ayuda y apoyo a la región afectada».
Élder Anthony D. Perkins
Élder Adilson de Paula Parrella
Élder Roland J. Bäck
Presidencia del Área Cercano Oriente/África Norte
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días